El lacado de aluminio es un proceso de protección superficial por pintura electrostática polimerizada, que proporciona menor resistencia que el anodizado, pero suficiente para condiciones ambientales no severas.
En las instalaciones horizontales los perfiles se someten a un pretratamiento por inmersión, para ser pintados posteriormente en una segunda fase. Normalmente la primera fase se realiza con perfiles empacados y la segunda montados en bastidores adecuados para la pintura.
Disponemos de instalaciones simples para pequeñas producciones, 86 perfiles/hora en líneas de 1 m/min, y de altas prestaciones, 620 perfiles/hora en líneas de 6 m/min. Todos los sistemas con opción de una o dos cabinas de pintura.